miércoles, 22 de julio de 2009

MARlango

Lo último que vi antes de cerrar los ojos fue oscuridad, una densa y nocturna oscuridad. Después supe que debía decidir.

Sabía que tenía que ser algo que donde quiera que estuvieras siempre te pudiera encontrar. Algo para lo que el retirarse solo significara volver con mucho más. Algo que dejara desatar mi furia si algún día viera tus ojos llorar.

Pensé en amaneceres de luz y esperanza, en noches con reflejos de plata y en un montón de cosas que de una forma u otra hicieran que no te quisieras marchar.

Y fue entonces cuando supe que lo que yo quería ser en mi nueva vida era Mar, porque si de algo estoy segura es de que eso tarde o temprano siempre lo irás a buscar.

Cuando abrí los ojos solo pude oler a Mar, solo pude oír las olas romper al son de una dulce canción.



1 comentario:

  1. qué bien escrito. cada palabra parece minuciosamente escogida; enhorabuena.

    ResponderEliminar